Retrocedamos veinticinco años....
En la 60 edición de los premios Oscar, asistimos a la categoría de mejor película extranjera. Varias nominadas, entre ellas "Asignatura aprobada" de Garci, "La familia" de Ettore Escola, la noruega "Pathfinder" y la gran favorita "Adiós muchachos" de Louis Malle. Pero salta la sorpresa y una película danesa se alza con la estatuilla, "El festín de Babette" una maravilla para todos los sentidos.
Volviendo a la fecha actual, y con el motivo de su aniversario, se anuncia que el próximo noviembre se vuelve a estrenar en una copia restaurada. Una muy buena noticia para volver a disfrutar o ver por primera vez esta película imprescindible para todo amante del cine.
El festín de Babette. Director: Gabriel Axel.
A finales del siglo XIX y durante una noche de tormenta, Babette llega a una remota aldea de Dinamarca. Viene de Francia huyendo de la revuelta de Paris de esa época. En este desolado lugar la acogen dos solteronas hijas de un estricto pastor. Allí vive bastante años, hasta que sorprendentemente la fortuna le sonríe ganando un premio en la lotería. Pero en lugar de volver a Francia, y ante la sorpresa de todos, Babette pide permiso para preparar una cena de celebración del centenario del pastor.
Al principio los vecinos tienen miedo y son reacios a ella, sobre todo por temor a dañar la ley divina que les rige, es una cena francesa!, pero poco a poco de manera maravillosa, todos van cediendo ante las delicias que les ha preparado Babette y ante los placeres de la cocina francesa.
La novela
La gran escritora danesa Karen Blixen, más conocida por su seudónimo de Isak Dinesen, la misma de "Memorias de África", escribió este cuento maravilloso.
Blixen escribió este relato para un semanario femenino
americano, y así ganar algún dinero para salir de la difícil situación en la que se encontraba.
Historia muy rica en matices y con un gran mensaje interior, que el director francés Gabriel Axel se encargó de dirigir para la gran pantalla.
Aunque puede parecer algo desproporcionado, esta película puede recordar a uno de los más grandes autores como Dreyer. No es tan compleja como puedan ser las obras del maestro danés, pero Axel comparte esa sencillez en la puesta en escena que tenía el maestro. Y no solo acaba aquí su homenaje, en la película comprobamos la inclusión de varios de los actores de las grandes películas de Dreyer. Incluso también podemos ver a Bibi Andersson, una de las actrices fetiches de Ingmar Bergman.
El Festín de Babette y la religión
La película contiene un importante mensaje religioso. Está repleta de símbolos y señales, el más importante de todos la gran parábola de el Festín sobre la Gracia.
“Nuestra elección no tiene importancia.
Llega un tiempo que se abren nuestros ojos y llegamos a comprender que la Gracia es infinita. Y lo único que debemos hacer es esperarla con confianza y recibirla con gratitud. La Gracia no pone condiciones”
Llega un tiempo que se abren nuestros ojos y llegamos a comprender que la Gracia es infinita. Y lo único que debemos hacer es esperarla con confianza y recibirla con gratitud. La Gracia no pone condiciones”
En una comunidad enferma, en proceso de involución, y con una ética muy rígida, Babette significa una liberación, una nueva alma, cristiana, que ofrece en su banquete una comida que mediante el goze, el deleite del cuerpo, cambia por completo el espíritu de esta aldea.
La gratuidad transforma esta comunidad abriendo sus corazones y recordando, que no estamos solos, el don de Dios puede aparecer en cualquier momento. La esperanza y la Gracia siempre están presentes.
Un mensaje claro, hay que tener presente que la fe se manifiesta en las obras realizadas, y sobre todo y muy importante, la exaltación de la bondad y el perdón entre nuestros semejantes.
Un mensaje claro, hay que tener presente que la fe se manifiesta en las obras realizadas, y sobre todo y muy importante, la exaltación de la bondad y el perdón entre nuestros semejantes.
La película acierta plenamente en su crítica hacia esa religión empecinada en su discurso equivocado, en que para ganarnos el cielo tenemos que sufrir y ser infelices en la Tierra.
"El festín de Babette" está repleto de una gran fuerza espiritual.
“En el paraíso tu serás la gran artista”
La película está dividida en dos partes.
La primera tendría un nombre, la sencillez.
La primera tendría un nombre, la sencillez.
Se nos presenta a esa comunidad, y los personajes que la forman. Asistimos a su austera vida, en donde la religión es su principal motivo de vida. Tal es el extremo, que sacrifican sus vidas y sus amores por ese fanatismo religioso.
Mediante una voz en off, asistimos a la narración de esta historia, de las dos sumisas hermanas, las cuales han perdido su vida, su juventud.
Pero todo esto está contado tan maravillosamente, que no las rechazamos, al contrario, sentimos por ellas un especial cariño.
Pero todo esto está contado tan maravillosamente, que no las rechazamos, al contrario, sentimos por ellas un especial cariño.
A través de flashbacks vemos esas historias del "no amor" de las hijas del pastor. En ellas asistimos a una de las escenas más bonitas de la película, en donde la ópera de Mozart "Don Giovanni" acompaña a una preciosa declaración de amor.
Es en su segunda parte cuando llega el momento de Babette. Gana la lotería y prepara el gran banquete. Es aquí en donde asistimos al cambio de los personajes. Una gran secuencia, el clímax de la película, una declaración de amor de Babette a la hospitalidad que ha recibido.
Llena de momentos extraordinarios, como los emotivos besos de dos ancianos para demostrarse el amor reprimido de tantos años, o uno de los más bellos de toda la película, el momento en el que los invitados se cogen de las manos y cantan bajo las estrellas. Una maravillosa metáfora del canto a la vida y a la felicidad, comprobando que ya no tienen temor al castigo divino que les ha perseguido toda su vida.
Stéphane Audran es Babette.
Extraordinaria la interpretación de esta actriz francesa, que por cierto fue la mujer del malogrado Claude Chabrol, actuando en la mayoría de sus películas.
Esta actriz compone un personaje inolvidable. Babette, como ella misma dice, es una artista. Y se sirve de ello para demostrar su agradecimiento a los que la han acogido.
Ese agradecimiento y esa forma de dar de sí lo mejor, es la manera en la que poder integrarse en sus vidas, recordemos que es una extranjera, una "invasora" (ella y su crucifijo) que altera la vida de esta comunidad.
Destacado e importante es el mensaje de Babette. En una de sus frases la cocinera dice "Un artista nunca es pobre".
Una frase que esconde un mensaje maravilloso, en donde los artistas, los creadores no necesitan de riqueza material, sino que el poseer esa experiencia artística, el proceso de la creación es lo más grande y donde más se disfruta.
Todo aquel que por su oficio, trabajo o placer se dedique a esto, estará de acuerdo conmigo. No hay nada más maravilloso que crear. Nada es comparable a esa experiencia, el mundo se disfruta de otra manera, eres único para el universo.
Es importante recordar que en mayor o menor medida, en este mundo somos artistas. Esto significa que tenemos que dar salida a nuestros dones o talentos. Debemos realizarlos para generar la felicidad que llevamos dentro. Bueno para nosotros y para nuestros semejantes. Nuestros cuerpos, nuestros sentidos necesitan saber que están vivos.
El director Gabriel Axel realizó una obra de arte. Tremendamente sencilla y humilde, pero grande en resultados. Su cámara no se nota, apenas notamos su presencia. Su puesta en escena respeta el más puro espíritu de la narración.
Cabe destacar la extraordinaria fotografía de Henning Kristiansen, que recrea perfectamente el ambiente austero de esta comunidad. La música en segundo plano de Peer Norgaard acompaña muy bien a estas imágenes nórdicas que Babette logra cambiar.
En definitiva una obra maestra de una belleza descomunal.
Una preciosa película de visión obligada para todos los amantes del cine, de la vida, para creyentes y no creyentes. Una invitación para disfrutar de la vida.
Por último creo que esta película es la favorita de todos los amantes de la cocina, en los cuales me incluyo. Si tuviera que elegir una sería esta. Por cierto, que para el mayor genio de la cocina, Ferran Adriá también es su preferida.
Receta de El Festín de Babette: Codornices en sarcófago con foie gras.
4 codornices
300 gr. de foie gras
50 gr. de trufa negra
c.s. de sal
c.s. de pimienta negra molida
Limpiar el foie y trocearlo. Con un pequeño cuchillo bien afilado, deshuesar las codornices de modo que queden enteras. Salpimentarlas. Rellenarlas con 70 / 80 gr. de foie gras troceado y la trufa cortada en pequeños trozos. Reconstruir el ave.
50 gr. de trufa negra
c.s. de sal
c.s. de pimienta negra molida
Limpiar el foie y trocearlo. Con un pequeño cuchillo bien afilado, deshuesar las codornices de modo que queden enteras. Salpimentarlas. Rellenarlas con 70 / 80 gr. de foie gras troceado y la trufa cortada en pequeños trozos. Reconstruir el ave.
Masa
300 gr. de harina de trigo
160 gr. de grasa de pato bien fría
c.s. de sal
Amasar los ingredientes. Dejar reposar el pastón 60 minutos en la nevera. Pasado el reposo, estirar la masa a unos 3 mm de grosor. Reservar en la nevera hasta su utilización.
Sarcófago
Forrar con la masa que laminamos 4 moldes pequeños. Se pueden usar unas latas rectangulares que sirven para confeccionar los blocs de foie gras. Sus medidas son de 10 x 15 cm, de altura. Existen unos moldes individuales específicos pero son muy difíciles de encontrar.
Colocar en cada sarcófago una codorniz. Confeccionar con la masa que ha sobrado unos pequeños rectángulos de 10 x 5cm que colocaremos sobre cada molde. Soldar con el resto de la masa. Hacer una pequeña chimenea en la parte superior del sarcófago con la punta de un cuchillo.
Hornear a 180º C durante 20 minutos.
Forrar con la masa que laminamos 4 moldes pequeños. Se pueden usar unas latas rectangulares que sirven para confeccionar los blocs de foie gras. Sus medidas son de 10 x 15 cm, de altura. Existen unos moldes individuales específicos pero son muy difíciles de encontrar.
Colocar en cada sarcófago una codorniz. Confeccionar con la masa que ha sobrado unos pequeños rectángulos de 10 x 5cm que colocaremos sobre cada molde. Soldar con el resto de la masa. Hacer una pequeña chimenea en la parte superior del sarcófago con la punta de un cuchillo.
Hornear a 180º C durante 20 minutos.
Fondo al vino de Madeira
15 cl de fondo de pato
50 gr de trufa negra
c.s. vino de Madeira
c.s. sal
c.s. pimienta negra molida
Reducir el fondo de pato con la trufa picada. Añadir el vino de Madeira. Salpimentar y reservar.
Servir el sarcófago con el fondo al Madeira bien caliente.
15 cl de fondo de pato
50 gr de trufa negra
c.s. vino de Madeira
c.s. sal
c.s. pimienta negra molida
Reducir el fondo de pato con la trufa picada. Añadir el vino de Madeira. Salpimentar y reservar.
Servir el sarcófago con el fondo al Madeira bien caliente.
Película completa: El festin de Babette.
Para el que no quiera esperar al reestreno y quiera verla de nuevo, aquí os dejo con ella, está doblada, pero menos da una piedra...
Ciudadano Noodles, como siempre nos descubre otra de esas joyas escondidas.
ResponderEliminarLe pido perdon de antemano, pero no he acabado de leerme su entrada, puesto que no he leido la novela ni he visto la película; e intento evitar cualquier clase de spoilers.
Pero me ha creado mucha curiosidad esta entrada, tanta que voy a intentar verla... aunque ya comienzo a tener una lista inmensa.
Me da la sensación, a riesgo de equivocarme, que es una película que debe trasmitir "buen rollo", ¿ podria ser la amelie de la época ? Algo búcolica, con una pizca de tristeza pero con un buen mensaje final ???
Una abrazo Ciudadano Noodles, y siga deleintandonos con sus fabulosas entradas.
SBP
Hola SBP,
EliminarEl mensaje que transmite la película es muy bueno y enriquecedor. Cargada de mucha profundidad, con esa critica hacia la religión tan extrema. Y sobre todo con un final maravilloso, en donde el goce de la vida es la causa principal del jolgorio.
"Amelie"? Nunca me lo hubiera planteado, y vistas las dos no veo ningún nexo de conexión. Supongo que como no soy muy amigo de la francesa, no soy muy objetivo.
Un abrazo.
Muchas gracias por publicar una entrada sobre la película en que interviene Stéphane Audran. Siempre es una agradable sorpresa leer alguna reseña sobre ella.
ResponderEliminarUn abrazo
Fandestéphane
Hla Fandestéphane,
Eliminarnada un placer poder escribir sobre una maravillosa película y una estupenda actriz.
Un abrazo.
Estupenda película, la vi en su momento en el cine, cuando se estrenó y la tengo en VHS, fíjate. Hay que avisar al personal que se disponga a verla que tenga la panza llena, pues los olores de los fogones parecen salir de esa vieja cocina de leña y le entra a uno un hambre que no veas. Dentro del subgrupo de películas gastronómicas, yo la pondría junto a Tampopo y Comer,beber y amar, en un podium. Babette, eso se llama a una mujer comprometida y agradecida...
ResponderEliminarSaludos
Roy
Hola Roy,
Eliminaryo también la tengo en VHS, que pena tener tantas películas en ese formato y no utilizarlas.
Sí es mejor verla ya recién comido o cenado, sino los jugos gástricos nos van a jugar una mala pasada.
Las otras dos que señalas me gustan mucho. Este "Tampopo" es una película bastante desconocida a reivindicar.
Un abrazo.
Hace poco que la he vuelto a ver y ha sido un gustazo!!
ResponderEliminarEs una crítica a la religión y a esas mentes cerradas que se dan, quizás, más especialmente en los pueblos pequeños y aislados. Ese contraste entre los habitantes del pueblo, fieles a sus creencias, en contraposición del militar que llega después de haber visto el mundo es un maravilla. A través de sus palabras nos damos cuenta de de lo que realmente sientes todos los personajes.
Una forma especialmente sabrosa de expresar el agradecimiento que siente Babette y su generosidad para con los que la cuidaron.
Una gran película!
Hola Manderly,
Eliminaren efecto, es todo un placer degustar esta pequeña joya.
Es tan grande y tiene un mensaje tan potente, que incluso en tu comentario te ha salido muy Dreyer. Ese mensaje, esa Palabra...
Maravillosa!
Un abrazo.
Pues no solo nunca la he visto, Amigo Noodles, sino que además tenía una idea muy equivocada sobre ella. Pensaba que era una película mucho menos trascendente y más fresca y digamos, ligera. Ya ves. Qué incultura!!! Pues este reestreno a sus 25 años será una gran ocasión para descubrirla. Como siempre, leyéndote apetece. Un abrazo.
ResponderEliminarHola David,
Eliminares verdad, que se tiene una idea equivocada sobre la película. Se tiende a pensar en que es más gastronómica que otra cosa.
Ese aniversario es una buena razón para volverla a ver de nuevo en los cines. Si puedes tienes una cita que no hay que perderse!
Un abrazo.
He encontrado tu blog buscando en google cosas de My Sassy Girl (adoro esa película), y he echado un vistazo...Y he decidido seguirlo, y de paso, apuntarme esta película :)
ResponderEliminarHola Lady Vengeance,
EliminarQue maravillosa es "My Sassy Girl", una de las grandes coreanas de los últimos años, y van unas cuantas.
Me apunto tu blog para pasarme por él.
Un abrazo.
Un magnífico post para una magnífica película, aunque algo dañina para estas horas en las que aprieta la gazuza, eso sí ;) Coincido contigo en todo lo que dices. Algunas cosas no las recordaba, así que aprovecharé el enlace.
ResponderEliminarUn abrazo
Hola Mara,
Eliminarmaravillosa en todos los aspectos. Una buena recuperación para estos tiempos que corren.
Es de esas películas que enganchan. Yo el enlace le empecé a ver y me quedaba, me quedaba...
Si por estas tierras la estrenan en el cine, daré buena cuenta de ella, con la "panza" llena, ;)
Un abrazo.
Qué película tan bonita, intimista, elegante...La vi hace algún tiempo y quiero volver a verla. Recuerdo un precioso monólogo de uno de los personajes cuando estan sentados alrededor de la mesa..
ResponderEliminarBuenísima tu entrada, Nooodles y muy apetitosa...
Un beso.
Hola Myra,
Eliminares una preciosidad de película.
En la mesa cuando están cenando se producen hechos y palabras realmente maravillosos.
Toda ella está repleta de magia.
Un beso.
Hoy me toca estar completamente de acuerdo con todo lo que has expuesto en tu reseña, El festín de Babette es una joyita, una película pequeña, hermosa y con maravilloso poso humanista.
ResponderEliminarMe encantan las interpretaciones, la exquisita puesta en escena y ese ritmo que pausado y lleno de cariño con que Axel, de la mano de Babette, marca el tempo de la película.
Una estupenda reseña para una película muy especial.
Un abrazo.
Hola David,
Eliminarpues sí, hoy era más fácil. Es complicado no rendirse ante los encantos de esta maravillosa historia, y sobre todo ante Babette.
Está realizada espléndidamente, la puesta en escena es asombrosa, para un director que poco ha hecho más.
Gran película.
Un abrazo.
La tenía ahí en mi lista de cintas nórdicas por ver y ya la tenía medio olvidada que leerte ha sido encontrarle nuevos entusiasmos, que haya ganado el oscar me crea mucha más curiosidad, creo que película extranjera siempre es de lo mejor habiendo tan pocos cupos. Tiene muchas cosas que atraen, como Bibi Anderson, Stephan Audran y Karen Blixen. Voy a verla en cuanto pueda. Un abrazo.
ResponderEliminarEl sarcófago es un voloban de pasta hojaldre...
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